Es una vidente como las de antes
Tengo 57 años y como muchas personas recurro a videntes por mi trabajo y no me avergüenza decirlo solo me cambio el nombre.
La cuestión es que llevo años recurriendo a videntes y antes acudía a consultas presenciales con muy buenas videntes.
Antía es la única que me recuerda a esas buenas videntes de siempre con su profesionalidad y su discreción.
Lo que la hace mejor aún es que es ella quien atiende las llamadas y no es nada presuntuosa.
Es muy sencilla y es muy humana y estableces con ella una conexión como si la tuvieses delante tuya.
Javier
06/09/2017